Este es un hermoso Ferrari 250 GTE de la tercera serie de 1964. El coche fue entregado nuevo en Milán al concesionario Ferrari M.G. Crepaldi Automobili en 1963 y un poco más tarde por primera vez provisto de matrícula. Se trata de un Ferrari con números coincidentes. El coche ha sido restaurado en un pasado reciente y ya ha sido revisado técnicamente en su totalidad por un especialista de la marca. Un detalle llamativo en esa restauración fue que el interior estaba todavía en tan buen estado que sólo fue necesario rellenar los asientos y engrasar el cuero. El interior tiene un aspecto precioso. El coche también está muy bien cuidado y en un momento posterior de su vida, sospechamos que durante la restauración, se equipó con un techo solar Webasto Tudor.La carrocería del coche tiene un aspecto precioso. La chapa es bonita y fina y los ajustes son correctos. La carrocería del Ferrari se redujo a chapa desnuda durante la restauración y se repintó por completo. Por lo tanto, la pintura todavía se ve muy bien y sólo tiene algunos rastros muy mínimos de uso. El techo solar Webasto Tudor funciona perfectamente, está en muy buenas condiciones y encaja perfectamente. Proporciona una experiencia de conducción casi abierta cuando se conduce el coche con las ventanillas y el techo abiertos y un efecto Targa cuando sólo se tiene el techo abierto. No es de extrañar que un propietario anterior decidiera hacer este trabajo. Las llantas Borrani son originales y durante la restauración fueron cromadas y equipadas con buenos neumáticos en las medidas correctas.
El interior está, como se ha indicado anteriormente, equipado con tapicería de cuero original. El cuero es maravillosamente flexible y tiene un aspecto hermoso. Durante la restauración, el interior del coche se equipó con alfombras nuevas y también se renovó el techo interior. El coche conserva el volante y los instrumentos originales. El interior del coche se ve bien cuidado y funciona como debería.la tecnología ha sido muy bien mantenido durante los años, después de la revisión. Por lo tanto, el motor funciona de maravilla y la transmisión se deja controlar con precisión. En el pasado reciente, el chasis ya fue renovado y los frenos también están bien mantenidos. El coche frena con la misma facilidad con la que coge velocidad. El 250 GTE fue el primer coche de Ferrari que se pudo construir en volúmenes échte y si lo conduces hoy entenderás completamente por qué es así. En aquella época, debía de ser casi imposible encontrar un Gran Turismo más deportivo con un brillante V12 que pudiera transportar fácilmente a cuatro personas. La calidad de construcción era perfecta, el motor una obra maestra absoluta y una buena transmisión y un chasis bellamente equilibrado. El coche viene con una copia del manual original. En resumen, un hermoso Ferrari 250 GTE de la tercera serie con un precioso techo solar grande y en muy buenas condiciones. Verdaderamente un coche típico que le encantará más con los kilómetros recorridos.