Los registros de producción de Healeys indican que unos 123 se vendieron únicamente como chasis rodantes con toda una gama de carrocerías diferentes. La mayoría eran inglesas e incluían berlinas, turismos e incluso camionetas o shooting breaks, como les gusta llamarlos a los británicos. El carrocero londinense Hobbs fabricaba shooting breaks con un uso intensivo de la madera en el exterior, como los Woodies que se fabricaban en Estados Unidos en aquella época. Hubo una serie de carroceros europeos que también utilizaron el chasis Healey, como la empresa suiza Beuttler con una serie de carrocerías abiertas y cerradas muy de moda, pero una vez más eran muy caros.
Este Healey Woodie Estate de 1948 fue construido por el muy conocido corredor de preguerra de Healey Elliott, Hector Hobbs, quien, como le gustaban los coches, decidió vender Healeys desde su garaje en Southampton. Para evitar el impuesto de compra del 30% encargó la construcción de 17 Woodie Estates sobre el chasis Westland Elliott. La carpintería fue entregada a los constructores de autocares Dibbins de Southampton y el trabajo de panel fue tomado de Westlandâs los constructores del Elliott y Westland Roadster. En la actualidad sólo sobreviven dos vehÃculos, el 607 YUP (FOW 178) fue descubierto en Escocia en muy mal estado. Hace unos tres años se inició una minuciosa restauración y se llevaron a cabo numerosas investigaciones para asegurarse de que el coche era correcto en todos los sentidos, sin escatimar en gastos. Probablemente el Woodie más rápido en la carretera hoy en día, que está configurado tan bien, que conduce como un sueño.