"Mercedes-Benz amplía la brecha"
Es 1986, y el diplomático estadounidense John Dixon ha sopesado sus opciones, ha tomado sus decisiones y ya no alberga ninguna duda. Tiene ante sí el folleto del Mercedes-Benz SL R107 y, expectante, coge el teléfono. El R107 ya había demostrado su valía a lo largo de los años y se había labrado una sólida reputación entre los deportivos europeos. Dixon opta por una especificación elegante y muy poco común: un seis cilindros en línea de 3,0 litros con una caja de cambios manual de 4 velocidades, acabado en color Champagne metalizado con interior de cuero, asientos traseros y, lo que es más importante, completamente original con una lectura auténtica del cuentakilómetros.
En 1988, al finalizar su destino en la UE, se lleva el coche a Estados Unidos, donde lo conserva hasta 1992, año en que se vende a un especialista en clásicos de Mercedes-Benz. Posteriormente, el coche permanece en la misma familia en Maryland hasta 2019, cuando un comprador holandés lo adquiere y lo lleva de vuelta a su país de origen para continuar su historia.
A su llegada, el coche recibió una revisión meticulosa en el Concesionario Mercedes-Benz Gomes, obteniendo todo lo que su corazón podía desear. Ahora está listo para pasar a manos de su cuarto propietario. Su historia completa está documentada, los folletos de servicio están sellados, y el kilometraje genuino de 91.000 km está plenamente confirmado. El coche está preparado y listo para circular.
Es un coche que susurra sofisticación en un suspiro y grita alegría en el siguiente.
En resumen: es un Mercedes SL R107. No sólo conduce, también conquista.