Este es un muy bonito Mercedes-Benz 500SL. El coche fue autorizado a circular por primera vez en los Estados Unidos en 1983 y siempre ha sido bien mantenido y cuidado hasta now.The cuerpo está en buenas condiciones y tiene original y chapa fina. La carrocería tiene algunas ligeras huellas de uso que son coherentes con la edad y el kilometraje del coche. Los parachoques cromados están limpios al igual que las gomas de la carrocería. El coche tiene una capota negra descapotable que funciona bien y cabe en todas partes. El 500SL está parado sobre llantas originales con neumáticos en las medidas correctas y con perfil suficiente. Como es habitual en los modelos Mercedes-Benz de esta generación, el interior parece hecho para la eternidad. Que el 500SL se comercializó como un coche de lujo queda claro una vez más cuando nos fijamos en el equipamiento de este ejemplo. El coche tiene climatizador, asientos calefactados, retrovisores eléctricos, elevalunas eléctricos, control de crucero y, en este caso, el tan querido pero raro asiento trasero. De hecho, el 500SL era el modelo superior de la gama SL en aquella época. El coche está propulsado por un motor V8 de 5,0 litros, que en este caso está acoplado a una transmisión automática de cuatro velocidades. Equipado con inyección de combustible Bosch D-Jetronic, el motor produce 240 CV y, al igual que el interior, está construido para durar. El kilometraje de casi 120.000 millas significa en el caso de este motor que las cosas acaban de empezar a funcionar bien. Gracias a su enorme capacidad de carrera, el motor siempre tiene par de sobra y puede hacer avanzar al 500SL sin esfuerzo y, si es necesario, incluso hasta una velocidad máxima de 225 kilómetros por hora. Para sacudirse con seguridad esa velocidad, es bueno saber que el 500SL también dispone de ABS. Los frenos son fáciles de accionar y el chasis proporciona al coche una conducción agradable. Por último, la caja de cambios automática cambia con suavidad sedosa. En resumen, un Mercedes-Benz 500SL bien cuidado listo para muchos kilómetros de placer de conducción en carretera abierta.