La historia del Opel GT se remonta a 1965, cuando Opel mostró un concepto de estilo en los Autosalones de París y Frankfurt. Los visitantes quedaron tan entusiasmados que Opel continuó con el proyecto y lanzó el GT en 1968. Con tecnología prestada del Kadett B y su aspecto a menudo mencionado en ééone aliento con el del Corvette C3 presentado a finales de 1967. Así, el coupé de líneas deportivas y fiables lo tiene todo para convertirse en un éxito. Donde el diseño parece bastante americano, el tamaño y la tecnología son tan europeos: con una longitud de 4,11 metros y un cuatro cilindros de 1,1 litros con 60 CV, al comprador no le entran inmediatamente ganas de enfrentarse a su ejemplar adulto en una pista de dragsters. Afortunadamente, Opel también ofrece una variante más potente de 1,9 litros que, con 90 CV, tiene bastantes menos problemas con el deportivo de 940 kg. Por lo tanto, es lógico que el cuatro cilindros de 1.897 cc sea el motor elegido para el reluciente Blitz. Este GT amarillo ocre data de 1972 y ha sido completamente restaurado. Las fotos de la restauración destacan el "método completamente desnudo" para luego reconstruir el GT a la perfección hasta su estado actual. Como resultado, el estado de la carrocería de acero y la pintura son excelentes, con paneles de cierre impecable. Incluso faltan por completo las costuras de la tapa del maletero: Opel realmente no pensó que fuera necesario un maletero de fácil acceso. Por lo tanto, las cosas que deban acompañarte entrarán por las puertas normales y, una vez allí, llama la atención el interior muy cuidado. Asientos cuidados, moqueta en estado nuevo y también un salpicadero que está muy limpio. El volante es original y muestra algunos signos de uso. Defectos o daños son ajenos a la Opel, el espacio de vida agradable y compacto en el GT hacer atmospheric.Driving el GT como el mejor, la técnica también se aborda a fondo en la restauración. El 1900 de cuatro cilindros es justo en el blanco, por lo que el coupé ligero un placer de conducir. Ni que decir tiene que la parte inferior está en tan buen estado como la superior. El Opel GT no es un coche para todos los días, pero como coche de usuario es una elección muy adecuada. En resumen: si quiere disfrutar de un coche que se distinga pero que no cause sorpresas: ¡el GT es el coche para usted!