"No es políticamente correcto (¿qué mejor razón hay?). - Porsche Alemania
El Porsche 911 Targa es una belleza de infarto de los entrañables (finales de) los años sesenta. Cuando aún se servían gasolina, los cigarrillos adornaban la mesa de cumpleaños y la cultura hippie desafiaba las normas.
La icónica capota Targa combina la emoción de conducir con el sol en la coronilla, el aspecto elegante de la barra Targa y la comodidad de un techo rígido. Lo bueno de este es que se trata de un proyecto hecho a medida. El propietario anterior puso su corazón y alma en esta joya y le dio toda la atención que necesitaba.
Ahora hablemos de su singularidad, empezando por el color. Wunchfarbe Kristalblau, uno de los colores más raros bajo demanda, sólo entregado por Porsche durante un número limitado de años. Al parecer, sólo un total de 75 ejemplares salieron de la fábrica de Porsche en Stuttgart en este color. Restaurado a la perfección. Todo, no sólo nuevo y fresco, pero el cierre con costuras perfectas todo alrededor.
Pero la gran fiesta tiene lugar en el motor de 3.0 litros. Y no, no se trata de una reunión en círculo con queso y salchichas en bandejas de plástico, sino de una fiesta explosiva que se observará durante años.
Este impresionante ejemplo está equipado con un motor de 3.0 litros. Que cuenta con nuevos pistones de alta compresión combinados con 6 ITBs. También llamados cuerpos de mariposa individuales que proporcionan una impresionante cantidad de velocidad. Además, una inyección controlada por ordenador asegura una distribución óptima del combustible. El ordenador controla, a través de un mazo de cables personalizado, el cilindro adecuado en el momento exacto con la cantidad perfecta de combustible (esto se denomina inyección secuencial). Todo esto se controla mediante sensores y, si es necesario, el ordenador lo ajusta en tiempo real. La fiesta se completa con un volante de inercia de carreras y una caja de cambios a medida para un cambio "Schnell" sin fisuras.
Esta configuración, junto con los estabilizadores, proporciona una experiencia de conducción sin precedentes. El coche 'cuelga' del acelerador y responde como ningún otro a cualquier presión de la punta del pie. El sistema de escape completo de acero inoxidable pone la guinda auditiva necesaria al pastel. Créanos, muchos transeúntes se romperán la crisma.
Súbase al asiento del conductor y prepárese para una explosión entre la clase del pasado y la tecnología contemporánea. Una situación en la que todos salen ganando.
No olvides traer tus vaqueros de pata ancha, camisas tie-dye, gafas de sol de aviador y mucha actitud.
Hay mucho más que contar sobre éste. Nos encantaría compartir cada detalle contigo, ¡hasta pronto!