Un clásico que, para muchos, personifica el 911. El 964 nació en Stuttgart entre 1989 y 1995. Comparado con su predecesor, el 964 era un 85% diferente, con muchas modificaciones y mejoras. Una vez más, detrás estaba ese motor bóxer de 3,6 litros refrigerado por aire, conocido como M64. Una potencia atmosférica que, como entusiasta del automóvil, no puedes arrancar sin una sonrisa o una carcajada.
El 964 era tanto más rápido que su predecesor que en 1989 sólo estaba disponible el Carrera 4 (4×4). Una vez que toda la tecnología estuvo a la altura del nuevo propulsor, nació el Carrera 2. Más ligero y tracción trasera. Parece la "receta perfecta" para los entusiastas del automóvil, ¿verdad?
Este Porsche 964 Cabriolet nació en 1990 en el Centro Porsche de Hamburgo. Tras unos años y un tiempo de inactividad en los Alpes alemanes, llegó a los Países Bajos en 1997. Fue revisado minuciosamente por numerosos especialistas de Porsche antes de que este ejemplar llegara a nuestra sala de exposición. Con un interior completamente de cuero y una preciosa pintura Plata Ártico, está exactamente como uno lo querría. En resumen, sólo podemos decir que se trata de un coche de números coincidentes que está ansioso por hacer más kilómetros. Con su fantástico aspecto y sus características de conducción únicas, seguramente se convertirá en un coche cada vez más apreciado en el futuro. ¿Lo vemos pronto?