Se trata del Toyota Celiga GT-Four Carlos Sainz, una edición numerada, posible gracias a la reglamentación de la FIA de la época, que obligaba a construir 5.000 modelos de carretera para poder utilizar el mismo modelo en el rally WRC. Estamos por tanto ante un auténtico Homologation Special, del mismo año en que la marca japonesa ganó el Campeonato del Mundo de Rallyes con Carlis Sainz.
Tras su lanzamiento, varios aspectos del diseño normal del Celica ST185 obligaron a introducir cambios para proporcionar la durabilidad necesaria en condiciones adversas de rally. Por ello, Toyota fabricó un número limitado de 5000 GT-Fours de esta edición especial, en honor al mismísimo El Matador: Carlos Sainz. Este, sin embargo, era el nombre europeo, en Japón se llamó GT-Four RC (Rally Competition). El exterior es visualmente diferente del ST185 común, que en lugar de una concha, el capó tiene una salida de aire (para expulsar el aire caliente del turbo) y una pequeña concha redonda para suministrar aire a los componentes de refrigeración (que se derretían durante los rallyes en los modelos más antiguos). El parachoques también tiene aberturas más grandes y está montado bajo una ligera barra de aluminio. Las ventajas técnicas son, entre otras, un intercooler agua-aire con pulverizadores de agua del radiador (desactivados en los modelos de carretera), turbina metálica en el turbo, mapas de combustible para niveles de sobrealimentación más altos, entre otros.
Esta unidad se encuentra en excelente estado original y nunca ha sido restaurada. Cuenta con los manuales originales y un certificado de autenticidad de la unidad 3751 de 5000. Es una excelente oportunidad para coleccionistas o amantes de los rallyes de los 90.