Un coche que aún conserva su pintura original, la primera tapicería en los dos asientos, su motor original y, cuando llueve, tiene que conformarse con la capota descapotable original. ¿Los cromados, como los parachoques y las molduras decorativas? Originales. ¿El libro de mantenimiento? Original. ¿Las llaves? Originales. Podríamos detallarlo todo, pero resumámoslo como un gran viaje en el tiempo. Un viaje increíble, debo decir, porque este Austin-Healey es un coche único. Quizá te preguntes si hay algo que no esté del todo bien. Te invitamos cordialmente a que vengas y compruebes por ti mismo este increíble coche.
El Big Healey que ve aquí estaba esperando ordenadamente en el concesionario de Greensboro, Carolina del Norte, el 25 de agosto de 1967, cuando el primer propietario, John Newman, vino a recogerlo. Originalmente negro con cuero rojo. Sin duda, Newman disfrutó conduciendo con la mayor de sus sonrisas mientras vaciaba el primer depósito de su 3000 aquel día, y no se separó de su coche durante mucho tiempo. Newman no sólo guardó todo lo que acompañaba a su coche, como el contrato de compra, el libro de mantenimiento, el libro de instrucciones de tapa dura, y las llaves y la tarjeta de entrega, sino que también era muy cuidadoso con su orgullo y alegría.
Como resultado, el coche siempre se mantuvo en un estado fantástico. Ese fantástico estado ha perdurado, por lo que el coche sigue conservando su pintura original y todos los demás aspectos son también totalmente originales.
Si está pensando que éste debe ser sin duda un coche que necesita una revisión completa, se equivoca. El coche ha sido sometido recientemente a una preparación completa, en la que sólo se han abordado los aspectos mecánicos, y no se ha hecho ninguna concesión a su carácter original.
¡Conducir el Healey es más que maravilloso! La sensación que transmite este 3000 no puede ser igualada por ningún coche restaurado. El carácter original de este coche impregna todo, ya sea el tacto de la tapicería de cuero, el encanto de la pintura original pero todavía hermosa - todo es verdaderamente único. Debido a que la tecnología del coche se ha abordado, este roadster se comporta fantásticamente, y con su fuerte motor de seis cilindros, es una alegría estar en la carretera con el Healey. Chasis, frenos, dirección: este Healey se siente como uno de los 3000 más frescos que hemos conducido y, mientras tanto, tiene la mejor historia que un coche puede tener: ¡completa originalidad!
¿Deberíamos mencionar las preciosas llantas de alambre? ¿Los elegantes indicadores y el magnífico volante? Sospechamos que no hace falta decir lo obvio. Normalmente, estos son detalles que podrían ser determinantes en una compra, pero si la historia anterior no le ha convencido sin estos pequeños detalles, no sabemos qué lo hará.
Como hemos mencionado, el coche viene con todos los documentos originales, folletos, facturas necesarias, documentos y artículos. Concluimos con un documento que añade un gran valor a un coche como éste: el Certificado de Heritage Trust. Menudo coche...