Qué día tan bonito debió de hacer en 1968. Cuando el primer propietario compró su nuevo Jaguar E-Type Series 1 Fixed Head Coupé en el concesionario local de Jaguar en Nueva York. Pidió un Jaguar E-Type Serie 1 de 4,2 litros en el atemporal color Opalescent Maroon con interior Beige. Casualmente, los colores que el coche sigue luciendo hoy en día. El coche sigue estando en perfectas condiciones. No es de extrañar cuando se mira la serie de fotos tomadas de la restauración. La carrocería se redujo a chapa desnuda y se reparó donde fue necesario antes de pintarla en su color original. El interior ha sido completamente retapizado con gran atención al detalle y originalidad. El trabajo también fue muy bien hecho, el resultado es por lo tanto todavía muy nice.The carrocería se ve hermosa con sólo algunos rastros leves de uso. Los ajustes son correctos y tanto las llantas de alambre como los embellecedores cromados tienen muy buen aspecto. La pintura también está en muy buenas condiciones, con un ligero desgaste. En la parte trasera, el doble tubo de escape montado en el centro llama inmediatamente la atención.que el coche siempre fue almacenado en el interior después de la restauración se nota inmediatamente después de abrir la puerta. El cuero sigue siendo muy flexible y las alfombrillas también están en muy buenas condiciones. Este coche ha sido muy apreciado. Los instrumentos y los mandos parecen muy bien cuidados y todos funcionan como deberían. Qué maravillosos eran los coches de los años 60 en toda su sencillez. La revisión se hizo tan a fondo como el trabajo de restauración durante la restauración. El motor ha sido desmontado hasta el último tornillo y equipado con muchas piezas nuevas, nuevas juntas y nuevos cojinetes. Se nota inmediatamente al conducir. El 6 cilindros en línea de 4,2 litros produce 265 CV, pero tiene un par motor muchísimo mayor que su hermano pequeño, el 3,8. Como resultado, el coche es maravillosamente relajado de conducir. El coche alcanza una velocidad máxima de 246 kilómetros por hora y puede cubrir el sprint estándar de 0 a 100 en 7 segundos. No es tan sorprendente si se tiene en cuenta su bajísimo peso de 1.300 kilogramos para los estándares actuales. El 4.2 no sólo tenía un motor con más par, sino que también recibió mejores asientos, un salpicadero más bonito, mejores frenos y una transmisión con sincronizadores en las cuatro marchas. La transmisión cambia con precisión y las marchas se adaptan bien al carácter deportivo del E-Type. La ventaja de una revisión tan rigurosa es que, con los materiales de que se dispone hoy en día, no sólo se obtiene un motor que funciona mejor, sino también uno que puede durar mucho más tiempo, ya que la calidad de todas las piezas utilizadas ha mejorado a pasos agigantados en las últimas décadas. En resumen, no sólo una imagen para ver, sino también un placer de conducir.